II.- EL NUEVO
CONTEXTO PARA EXPLICAR EL CREDO
Ø En los últimos años,
la Iglesia ha tenido que hacer frente a grandes retos para la fe:
- Después de las
Guerras Mundiales, se ve obligada a fundamentar la esencia del
cristianismo, frente al reto del marxismo
y otras ideologías materialistas.
- En los años 50-60
se hace patente el conflicto en varios temas entre Fe y ciencia.
- Hacia los años
70, surgen divergencias internas
en la Iglesia sobre su ser y misión: Se pone en crisis el papel de la
autoridad.
- En los años 80,
la teología de la liberación
plantea el reto sobre cómo dar sentido a la esperanza y a la justicia.
- A partir de los
90, las religiones orientales
van introduciéndose en nuestra cultura. Primero aparecieron como un complemento
a la fe en Cristo, después como una alternativa.
- Paralelamente, toma protagonismo el fenómeno de la New Age que relativiza el valor de las religiones y pone al hombre como reinterpretador de la fe. Según esta corriente ecléctica, Dios no es un ser personal, sino una fuerza.
- A comienzos del siglo XXI, en Europa la fe eclesial se ve cuestionada por el avance fuerte de dos extremos: el laicismo y el Islam fundamentalista. Surge el fenómeno de la cristianofobia.
Ø
Llegados
a este momento, el papa Benedicto XVI nos recuerda, una y otra vez, que el
cristianismo no es una mera religión natural ni solo el resultado de una
cultura, sino la expresión de la
manifestación definitiva de Dios en la historia personal de Cristo, con su
prolongación mediante una comunidad de Fe (la Iglesia).
No hay comentarios:
Publicar un comentario